¿Tienes identificada cuál es la métrica clave para un negocio? A medida que más empresas se esfuerzan por estar basadas en datos, es posible que haya oído hablar de la idea casi mítica de guiar su negocio con una sola métrica. ¿Qué te parece esta idea?
Hay quienes opinan que concentrarse en una sola métrica clave permite a los líderes empresariales eliminar las distracciones innecesarias y acelerar drásticamente el crecimiento. Sin duda, esto sería el sueño de muchos.
¿Qué pensarías si te dijera que esto puede ser una realidad? Al seleccionar la métrica clave para un negocio de manera correcta, puedes maximizar su potencial e identificar las áreas problemáticas y las oportunidades de crecimiento.
Suena sencillo, pero hay una trampa (o cuatro):
- Una sola métrica clave no es un modelo único. Las necesidades únicas requieren métricas únicas.
- Una sola métrica clave está sujeta a cambios. Los objetivos cambian …. y las métricas también deberían cambiar.
- Una sola métrica clave no significa tenerla y olvidarla. Debes monitorearla.
- Una sola métrica clave no significa ignorar todas las demás métricas.
Conoce más de la importancia de las métricas para empresas.
¿Cómo sacarle provecho a una sola métrica clave para un negocio?
Existen maneras de abordar estos cuatro temas para que puedas tener una sola métrica de manera correcta y sacarle el máximo provecho:
Problema #1: Una sola métrica clave no es un modelo único. Las necesidades únicas requieren métricas únicas.
A pesar de lo agradable que sería, no hay una sola métrica en la que todas las empresas deban centrarse directamente. Incluso algo tan universal como los ingresos no será el estándar clave que impulse el éxito de cada negocio.
Hay diferentes modelos de negocio, cada uno de ellos sigue un patrón y utiliza ciertas métricas para definir e impulsar su éxito. Identifica qué métricas se ajustan a tu empresa, cuáles aplicar y sigue su patrón… Sólo asegúrate de tomar en cuenta tus necesidades empresariales únicas.
Te recomendamos leer: Cómo seleccionar métricas de una empresa.
Problema #2: Una sola métrica clave está sujeta a cambios. Los objetivos cambian … y las métricas también deberían cambiar.
Una métrica clave para un negocio debe ayudarte a progresar hacia una meta específica, y si tus metas no cambian a medida que evolucionas y creces, es probable que algo no funcione.
La métrica que elijas debe medir tu progreso hacia la siguiente meta. Pero ten cuidado: sobreestimar el progreso puede ser perjudicial. Cada etapa se basa en el crecimiento alcanzado en la etapa anterior, y saltarse un paso puede ser una trampa.
Descubre la importancia de monitorear tu negocio.
Problema #3: Una sola métrica clave no significa tenerla y olvidarla. Debes monitorearla.
Sería bueno elegir una métrica sólida, lanzarla en un dashboard y empezar a ver resultados instantáneamente. Pero se necesita un poco más de trabajo que eso.
Una métrica clave para un negocio debe ayudarte a crecer tu negocio, tiene que causar cambios en el comportamiento. Por ello debes saber cuál será el cambio antes de recopilar los datos.
Una vez que haya seleccionado la métrica a seguir debes evaluarla constantemente. ¿Está cambiando la forma en que tu equipo y tú trabajan? ¿Te está ayudando a progresar? Si no, es hora de elegir una nueva métrica.
¿Sabes cómo gestionar KPIs?. Este artículo te ayudará a lograrlo.
Problema #4: Una sola métrica clave no significa ignorar todas las demás métricas.
Un aspecto atractivo de tener una métrica clave para un negocio es su aparente minimalismo. Después de todo, tratar de rastrear cientos de datos es abrumador, y es fácil ser seducido por tener un solo número.
Sin embargo, tus datos están conectado de mil maneras diferentes. Necesitas visibilidad en otras métricas para entender el contexto de tu única métrica. Cuando cambie, tienes que ser capaz de analizar qué causó el cambio, y eso puede ser difícil si no estás siguiendo una variedad métricas.
Encuentra aquí cómo monitorear datos de diversas fuentes de manera eficaz.
Así que mientras que tener una única métrica clave te permite enfocar la atención en un lugar, no significa que debas dejar de ver todo lo demás.
¿Vale la pena una sola métrica?
Con una métrica clave para un negocio, tu enfoque se agiliza para que puedas centrarte en lo que más importa en tu negocio. Te permite establecer objetivos claros y distintos para que puedaS priorizar y alinear tus esfuerzos. También facilita que todo el equipo se reúna con un propósito común.
Por ello, tu métrica puede cambiar la cultura de tu empresa uniendo a tu equipo y animándolo a experimentar. Cuando todos trabajan juntos para lograr una meta, cada individuo se siente inspirado a probar cosas nuevas.
Aunque algunos experimentos pueden fracasar, esos fracasos se convierten en una valiosa experiencia de aprendizaje que inspira más innovación. Tu equipo se convierte en un motor que impulsa continuamente el éxito.
Conoce algunas empresas que utilizan Big Data para innovar.
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