Si quieres alcanzar una meta, debes establecer objetivos estratégicos. Para ello, las empresas fijan plazos que suelen ser superiores a los dos años.
Ya sean cualitativos o cuantitativos, estos objetivos se cuantifican mediante el seguimiento periódico de las diferencias entre las previsiones de la empresa y los logros reales.
Conozcamos más de esta clase de objetivos de una empresa
¿Qué son los objetivos estratégicos?
Los objetivos estratégicos son las metas y resultados financieros y no financieros a los que se dirige una empresa durante un periodo de tiempo determinado.
Los objetivos estratégicos son uno de los tres elementos que el equipo directivo de una empresa debe formular en su proceso de planificación estratégica. Los otros dos elementos son los factores clave de éxito y su alcance estratégico (productos y servicios ofrecidos, clientes y mercados objetivo).
Para qué establecer objetivos estratégicos
Se establece un objetivo estratégico en función de :
- La finalidad de la organización. No todas las organizaciones tienen el mismo objetivo. Por ejemplo, las empresas tienen una finalidad lucrativa, mientras que las organizaciones públicas tienen una finalidad no lucrativa.
- Los recursos de la organización. El directivo debe saber de qué recursos dispone y qué recursos debe desarrollar para alcanzar los objetivos estratégicos.
- El entorno (microentorno y macroentorno) en el que opera la organización.
Ventajas de establecer objetivos estratégicos
Estas son algunos de los beneficios de darle seguimiento a tus objetivos estratégicos:
- Orientan el establecimiento de prioridades, la asignación de recursos, las necesidades de capacidad y las actividades presupuestarias.
- Proporcionan la base para los objetivos de los empleados y del equipo que centran y unifican los esfuerzos de todos los empleados.
- Proporcionan la información necesaria para la planificación de marketing, operaciones, informática y recursos humanos para los próximos años.
- Proporcionan puntos de referencia para comparar los resultados previstos y los reales.
- Las empresas utilizan la información obtenida de su análisis FODA para fijar sus objetivos. Esta información se actualiza anualmente como parte del proceso de planificación estratégica.
Tipos de objetivos estratégicos
Los objetivos estratégicos pueden ser concretos o abstractos (es decir, medibles o no). Ambos tipos de objetivos deben definirse para diversas partes interesadas, como los clientes, los empleados o los accionistas.
Estos son algunos ejemplos de objetivos concretos y abstractos por parte de los interesados:
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Objetivos concretos (medibles)
- Clientes: Aumentar el número de clientes en un 5% al año. Lograr tasas de retención del 85% o más.
- Empleados: Mantener el número de empleados en los niveles actuales. Lograr que los empleados se comprometan en un 85% o más.
- Accionistas: Aumentar los ingresos en un 7% y los ingresos netos en un 14% al año. Lanzar cinco nuevos productos al año.
- Clientes: Aumentar el número de clientes en un 5% al año. Lograr tasas de retención del 85% o más.
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Objetivos abstractos (no medibles)
- Clientes: Que los clientes hablen a sus amigos de la empresa
- Empleados: Que los empleados recomienden a la empresa más candidatos nuevos. Fomentar un comportamiento ético y respetuoso
- Accionistas: Mejorar la responsabilidad social de la empresa. Convertirse en líderes en innovación
Usa un dashboard para monitorear los objetivos estratégicos
Puedes hacer uso de un dashboard para visualizar tus diversos objetivos y tener claridad de a qué darle prioridad para alcanzar las metas planteadas.
Un dashboard es una herramienta de visualización que te permite dar transparencia a la salud de tu negocio, en tiempo real, y tener datos de diversas fuentes en un solo espacio para poder tomar las mejores decisiones para tu organización.
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