Hoy haremos una introducción a los OKRs para valorar la importancia de fijarnos una meta y cumplirla.
Establecer objetivos es una parte esencial de la vida de los gerentes y CEOs. Sin establecer objetivos concretos, corres el riesgo de perder el enfoque por completo y perder inversión en lo que realmente importa.
Pero para los empleados, el establecimiento de objetivos puede parecer una gran pérdida de tiempo.
Para muchos, trabajar con OKRs es algo inútil, pero cuando siguen una metodología OKR por un tiempo se sorprenden de su valor.
Entonces, ¿qué pasa si tu jefe entra a tu oficina y te dice “a partir de ahora vamos a comenzar a utilizar objetivos y resultados clave para establecer metas trimestrales”? Te ayudaremos a resolverlo.
¿Qué es un OKR?
OKR significa «Objetivos y Resultados Clave». Se trata de un sistema de gestión para definir objetivos, aplicarlos a todos los niveles y asociar resultados clave. Estos últimos contribuyen al éxito del objetivo.
Inspirado por el trabajo de Peter Drucker en los años 50 sobre la gestión por objetivos (MPO), Andrew Grove, CEO de INTEL, formalizó «Objetivos y Resultados Clave» en los años 80. Este sistema es implementado hoy en día por todo tipo de compañías, incluyendo Google y Spotify.
El objetivo general de los OKR es vincular las metas corporativas, de equipo e individuales con resultados mensurables, al tiempo que permite a todos los miembros del equipo y a los líderes trabajar juntos en la misma dirección.
¿Cuál es la importancia de tener objetivos?
Tener objetivos bien definidos es clave para tu negocio. Estas son algunas de las razones:
- Visión de a dónde quieres llegar
- Priorización de cómo llegar ahí
- Saber qué se espera de ti
- Guiar a las personas hacia el camino correcto
- Enfoque diario en las metas más importantes
Introducción a los OKRs para empleados
Cuando los empleados no están muy entusiasmados con el cambio, los sistemas de establecimiento de objetivos tienden a fracasar.
Por lo general, todos están atrapados en las maneras antiguas de trabajar o el empleado siente que aprender un nuevo sistema es una pérdida de tiempo. Sin embargo, es esencial tener un sistema de gestión. Comenzar a usar OKRs es solo una forma de abordar esto.
Todos los miembros del equipo deberían tener una comprensión clara de los objetivos generales al utilizar los OKRs.
Cuando todos saben cómo importa su trabajo, aumenta el compromiso general, la motivación y la determinación.
Tener una guía de introducción a los OKRs te ayuda a conocer que es uno de los sistemas más fáciles de utilizar que existen.
Esta guía te mostrará exactamente cómo comenzar.
Cómo comenzar a utilizar los OKRs
OKR es un proceso simple de establecer objetivos empresariales, personas y de equipo mientras que conectas cada uno de los objetivos con 3-4 resultados medibles.
A medida que alcanzas esos resultados, todo objetivo se marca como “hecho”. Esto significa que a medida que logras un progreso con resultados medibles, el objetivo en sí también progresará.
Lo importante es que te ayuda a enfocarte solo en lo que es realmente importante.
Descubre cómo implementar OKR de manera correcta.
Estructura de los OKRs
Comienza definiendo 3-5 objetivos de una compañía, equipo o a nivel personal. Los objetivos deben ser ambiciosos, cualitativos, limitados en tiempo y procesables por la persona o equipo. Un buen ejemplo sería “aumentar la satisfacción del cliente”.
Para cada objetivo debes definir 3-5 resultados medibles. Los resultados clave muestran cómo sería el éxito. Con los resultados clave sabes cuándo has logrado el objetivo.
Los resultados clave no son tareas, son el resultado final de una serie de tareas. Es importante recordar que las tareas no pertenecen a los resultados clave.
Aprende cómo implementar objetivos y resultados clave.
Los resultados clave deben ser cuantificables, alcanzables, tener una evaluación objetiva y ser difíciles, pero no imposibles. Los resultados de OKR pueden basarse en el crecimiento, el rendimiento, los ingresos o el compromiso/participación.
Muchas veces son numéricos pero también se pueden presentar como “hecho” o “sin hacer” o calificados con un sistema binario de “0 o 1”. Un ejemplo de un buen resultado clave sería “Obtener 100 calificaciones positivas en nuestro chat de soporte”.
Utilizar los OKRs te ayuda a ser más fácil y comprometido con tu trabajo, esto agrega mucho al ambiente laboral y al espíritu de equipo.
Establecimiento de objetivos trimestrales
Continuando con nuestra Guía de introducción a los OKRs, necesitas evaluar los OKRs al menos cada tres meses. Sin embargo, en realidad debes revisar el progreso de tus objetivos semanalmente.
Se establecen nuevas metas al inicio de cada trimestre. Para un empleado, esto significa que no tienes que perder tiempo en juntas 1 a 1 cada mes, lo que te da más tiempo para dedicarte a alcanzar tus objetivos.
Olvidar tus objetivos y enfocarte en tareas sin importancia sucede con mucha frecuencia cuando se te califica únicamente una vez al año durante una revisión anual.
Cuando termina el año, es terrible descubrir que has hecho las cosas mal y que la dirección no está contenta.
Con OKRs trimestrales, evitarás un fracaso tan desagradable enfocándote constantemente en tus objetivos.
Es mucho menos estresante y se adhiere a una rutina más estricta, poniendo los objetivos en perspectiva para que siempre puedas monitorearlos.
Aquí 5 consejos para medir lo que importa.
¿Qué son los objetivos?
Si estás preparando a tu equipo para una introducción a los OKRs, deben saber diferenciar a un objetivo de un resultado clave.
Los objetivos son metas cualitativas e inspiradoras. Describen el resultado deseado. Por lo tanto, los objetivos te dan tareas claras para ayudarte a mantenerte en el camino.
Las principales características de los objetivos son:
- Accionables: Los objetivos deben ser metas que una persona o equipo puedan realizar de forma independiente. Si, por ejemplo, trabajas en marketing eso podría ser “Implementar exitosamente un newsletter semanal”.
- Inspiradores: Deben emocionarte y darte una razón para estar mentalizado el lunes por la mañana cuando vayas a trabajar. Objetivos como “Entregar la nueva línea de productos con éxito”. “Mejorar nuestra línea de productos X para que los clientes estén más felices”, es un buen ejemplo;
- Limitados en tiempo: Como se mencionó anteriormente, los OKRs se establecen para el trimestre lo que significa que el objetivo debe alcanzarse al final del ciclo.
Podría ser algo como “Organizar eventos motivacionales para mejorar la moral del equipo”.
Resultados clave
Los resultados clave son las métricas que impulsan tu objetivo hacia adelante. Ayudan a enfatizar el elemento importante de “enfocarse” en tu objetivo proporcionando formas medibles de avanzar hacia la consecución de la meta.
Un ejemplo de un objetivo con resultados clave se vería de la siguiente manera:
Objetivo: “Organizar eventos de equipo para aumentar la felicidad de los empleados”
Resultados clave 1: Organizar 3 eventos mensuales
Resultados clave 2: El 100% de los empleados asiste al menos a uno de los eventos
Resultados clave 3: Lograr que el 95% de los empleados respondan la nueva encuesta de satisfacción
Resultados clave 4: Aumentar la satisfacción de los empleados de 7 a 8.5
Como puedes ver, los resultados clave no son los mismo que el modelo de objetivos SMART, pero ambos provienen del estilo de gestión por objetivos.
Las métricas, el tiempo y la alineación son factores importantes en ambas metodologías. Sin embargo, los objetivos SMART están aislados. Los objetivos y los resultados clave trabajan juntos pero también son sus propias categorías separadas.
Como un pequeño recordatorio, el acrónimo SMART significa:
- Específico: ¿el objetivo está bien definido y es comprensible para todos?
- Medible: ¿Puedes medir el éxito o el fracaso?
- Alcanzable: ¿Es realmente posible hacerlo?
- Relevante: ¿Este resultado es importante para tu objetivo?
- En tiempo: ¿He establecido claramente cuándo se debe cumplir el objetivo? Para los OKRs, este tiempo generalmente es un trimestre.
Si ya estás utilizando el modelo SMART en tu organización, evaluar tus resultados clave en función de ellos sirve como un buen modelo para comenzar.
Dicho esto, los resultados clave no son objetivos SMART y no tiene que seguir los mismo criterios siempre y cuando estén impulsados por una métrica.
Monitorea tus OKRs con la ayuda de un dashboard
Continuando con la introducción a los OKRs debes estar consciente de que debes revisarlos cada semana para asegurarte de que trabajo que realizas es importante.
De esa manera, puedes ver si las tareas que has realizado realmente te impulsan hacia el cumplimiento de tus objetivos. Y es mucho más fácil mantener tu enfoque día a día. Después de todo, esta es la idea principal detrás del marco de OKRs.
Si has planificado tus objetivos de manera anual, crea OKRs trimestrales. Este es un cambio enorme que requiere compromiso en todos los niveles.
Afortunadamente existen muchos recursos disponibles para hacer que tu experiencia con los OKRs sea menos abrumadora.
Utiliza un software para dashboard que te permita tener una mejor visibilidad de cada una de tus tareas y poder monitorear, en tiempo real, el desempeño de tu equipo.
Mantente atento de lo que tienes que mejorar y enfócate en ello al instante. No esperes al final del trimestre para darte cuenta del por qué no cumpliste con tus objetivos.
Si quieres saber cómo funciona nuestra herramienta de visualización de datos, no dudes en contactarnos. Agenda una demostración y resuelve todas tus dudas.
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